Maro Schoch, flamante DT de la Open de futsal, manifestó su
alegría por ser designado nuevamente para una Macabeada y además le tiró flores
a sus jugadores: “Es un grupo serio, exigente y ganador”. También le agradeció
a Oscar Birencwaig “por todo lo que hace”.
¿Qué sentís al ser nuevamente designado como DT de
futsal Open?
Siempre es una
satisfacción participar de un evento macabeo y formar parte de la delegación Argentina,
y un orgullo conducir este grupo para tan importante proyecto.
¿Esperabas la designación con ansias, teniendo en
cuenta que en San Pablo no pudiste salir campeón? ¿Lo tomás como una revancha?
No lo tomo así.
No me gusta la palabra revancha, me gusta más pensar en la continuidad y
desarrollo del gran trabajo que se hizo en San Pablo, con un equipo que va a
llegar a Israel buscando el mismo objetivo, con las mismas fortalezas que ya
mostramos en cancha, pero con más experiencia y madurez.
¿Qué se le puede tocar o modificar a un equipo tan
sólido y positivo como éste? Teniendo en cuenta que marcha en los primeros
puestos del futsal de AFA y la base es siempre la misma.
Obviamente la
base del plantel es la Primera División
de Hebraica que compite con muy buenos resultados en el nivel mas alto del
futsal nacional de AFA, pero siempre estamos mirando juveniles que asoman con
gran proyección y jugadores de USAR de Rosario u otros clubes del interior que
pueden darle más nivel todavía a esta Selección. Sería bárbaro lograr integración
en el plantel como es el objetivo de todo proyecto macabeo.
¿Se pueden retocar muchas cosas de un equipo que
hace las cosas en gran forma y con creces todos los años?
El objetivo es
llegar lo mejor preparados posible física, anímica y grupalmente. Lamentablemente
en San Pablo el equipo llegó con lesiones, falta de competencia y enfermedades
que sentimos en algún momento del torneo. La fecha ahora nos favorece para no
llegar tan desgastados como fue el fin de año de San Pablo. Por otro lado es un
grupo inquieto, exigente, que siempre quiere sumar y aprender individual y
colectivamente. Ésta es para mí la principal característica de un equipo que no
tiene techo.
¿Cuál crees que es la virtud que tiene este equipo
más allá de todo?
El compromiso
y la integración grupal, además de las cualidades deportivas y la mentalidad
ganadora de sus referentes, es un grupo muy serio y serio no es aburrido, es un
grupo de chicos ubicados que cuando trabajan son muy exigentes y en el tiempo
libre, son los más divertidos y unidos.
¿Cuál es el objetivo en Israel?
Son dos, la
medalla de oro y dejar la misma imagen como grupo y equipo que dejamos en San Pablo.
La Macabeada
mundial y este equipo justifican todos los esfuerzos para llegar a estos
objetivos.
¿Cuáles son los pasos a seguir?
Antes que nada
y asado de por medio, reencontrarnos para una evaluación profunda de lo que fue
San Pablo que tenemos pendiente y a partir de ahí, planificar este año tanto en
lo deportivo como en la recaudación de fondos para que ningún jugador se pierda
el evento por limitaciones económicas, objetivo tan importante como la medalla.
¿Te gustaría agregar algo más?
No me puedo olvidar
y dejar de agradecer a Oscar Birencwaig, padre, delegado, asistente, ayudante,
compañero, que con su tiempo, pasión y empuje sostiene y motiva para que el
grupo siempre esté presente.
Por Jonathan
Steingard.
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