El mejor tenista de la
colectividad, Diego Schwartzman, se consagró en lo más alto de la
Copa Topper
La tercera Copa Topper inscribió hoy un nuevo nombre en su lista
de campeones: Diego Schwartzman se quedó con el título al vencer en la final al
francés Guillaume Rufin, cuarto favorito, por
6-1 y 7-5 en el certamen que cerró la gira de tres eventos de la Asociación Argentina
de Tenis pertenecientes al ATP Challenger Tour.
Ganador de
seis Futures esta temporada, Schwartzman es el primer tenista argentino de la
generación de 1992 que logra un título Challenger. Ese grupo de tenistas que
desde juniors ocupa un lugar destacado también lo integran Agustín Velotti y
Facundo Argüello, que en estos momentos disputan la final de dobles, así como
también Renzo Olivo y Andrea Collarini.
Schwartzman
arrancó el año en el puesto 371 del ranking mundial, pero desde mañana, y
gracias a su gran temporada, aparecerá por primera vez entre los 200 mejores
tenistas del mundo.
"Estoy
muy feliz, para mí fue una gran semana. Quizás no esperaba tanto ser campeón,
pero a medida que fueron pasando los partidos me fui sintiendo cada vez mejor y
fui creyendo que podía. Creo que, más allá de algunos altibajos, jugué muy
bien, muy sólido y por suerte logré este título", dijo el campeón.
"Inolvidable",
definió el “Peque” cuando le preguntaron por esta semana y el título en la Copa Topper.
"Sin dudas es muy importante para mi carrera. Con Sebastián Prieto, mi
entrenador, yo me había puesto como objetivo para este año terminar entre los
250 mejores, pero ya me metí entre los 200, así que estoy muy feliz",
agregó.
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