Con la obligación de mejorar

CAMBIAR. Es lo que debe hacer Cissab para mejorar.

Tras conseguir un 7º puesto en el 2010, Cissab debe si o si cambiar la imagen que dejó. Tiene la presión de no pelear nada desde hace varios años y sus jugadores se exigen a si mismos estar bien arriba. ¿Podrá la Naranja lograrlo?

El 2010 definitivamente no fue un buen año para Cissab.  La Naranja arrancaba con una victoria en Primera sobre Hebraica jugando un buen fútbol luego de una dura pretemporada y la ilusión de terminar con la sequía de años anteriores estaba latente.

Se logró una buena cosecha de puntos en la primera ronda, pero en la segunda sucedió todo lo contrario. Se perdieron muchos partidos y los jugadores no daban abasto, por lo tanto el DT tuvo que empezar a citar jugadores de la Reserva para el banco de Primera.

Durante el año prevaleció la buena onda en el plantel, asados de por medio y se formó un muy buen grupo, teniendo en cuenta que el mismo está compuesto por jugadores de distintas edades.

Llegaron refuerzos, como Sebastián “La Foca” Saal, quien se adueñó del arco de la Reserva y fue muy importante para el subcampeonato. Otro que llego fue Nico Ventura. El Turco habló con Stampa: “Fue un año muy bueno en el que merecimos ganar muchas cosas por como planteábamos los partidos y sobre todo por la unión y amistad interna dentro del plantel. Es un grupo increíble y estoy orgulloso de haber venido y agradecido porque me dejaran entrar. Pongo las manos en el fuego por este equipo, lo que se necesita es mas compromiso por parte de todos en el entrenamiento y nunca bajar los brazos”.

Sin dudas que Cissab es siempre candidato. Material sobra y ahora es momento de trabajar intensamente y analizar que es lo que se hizo bien y que es lo que se hizo mal. Corregir los errores y pulir las virtudes.

El 2010 quedó atrás y el 2011 se viene con todo y esta vez los de Tristán Suárez sueñan con volver a los primeros planos futbolísticos. ¿Podrán lograrlo?

Por Diego Wajsbrut.