El nuevo técnico de Macabi, Sergio Orsini, confía a muerte en sus jugadores de la Primera. Dice
¿Cómo ves al equipo en estos pocos días que llevas con ellos? ¿Con que te encontraste?
Al equipo lo veo muy bien, muy motivados ya que estamos en plena pretemporada y se sabe que es lo más duro. Me encontré con un grupo de jugadores totalmente predispuestos intentar hacer algo importante este año.
¿Hay material como para pelear arriba?
Mirá, no soy de hablar de más, pero creo que vamos a ser animadores del campeonato.
¿Cuál es tu idea de juego y a que aspirás?
Yo soy súper exigente y quiero ganar todo hasta en el fútbol tenis, pero hay que estar tranquilos, a mi me gusta mucho el buen trato de balón, sobre todo en este torneo que las canchas lo permiten.
¿Cómo te recibieron los jugadores?
La verdad es que todo el mundo me recibió muy bien, dirigentes, coordinador, jugadores y compañeros de trabajo. Estoy muy a gusto, es una gran familia.
¿Vas a traer refuerzos?
La verdad que no. Estoy contento con el plantel que tengo, aparte hay muy buenos jóvenes en Macabi, así que tengo la idea de ir utilizándolos para que ganen minutos y experiencia.
¿Qué jugador del club te llamó la atención?
La verdad que me gustaron mucho el Brian “Chino” Gips, defensor central, Martín Gluch, que juega de enganche y el Mini Felder también, que es mediapunta.
¿Cuál es tu ideal de esquema táctico?
A mi me gusta jugar con tres en el fondo, tres en el medio, doble enganche y dos puntas, pero necesito tiempo. Calculo que no desviaré la tradición de Macabi y arrancaré con el clásico 4-3-1-2.
¿Conocés el fútbol de FACCMA? ¿Qué imaginas de este torneo?
La verdad es que no conozco mucho el torneo, pero no deja de ser fútbol. Confío en el grupo que tengo para pelear arriba. Solo se que hay muy buenas canchas entonces aprovecharemos eso.
¿Qué te gustaría decirle a la gente de Macabi?
Primero gracias por confiar en mí, a los dirigentes, al coordinador Lule, a Nico Zolotow. Y que se queden tranquilos que mis jugadores y yo dejaremos muy bien parada a la institución.
Por Jonathan Steingard.
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