“Soñaba con venir a Buenos Aires”

Debora Klinger dejó Macabi Noar de Córdoba para venirse a vivir a Buenos Aires y aquí encontró un nuevo hogar: Hebraica. La Cordobesa es entrenadora de hockey del club de Pilar y disfruta mucho de lo que hace. “La verdad es que hoy en día estoy muy contenta”, expresó. Conocé su historia de vida en Stampa.

Con la idea de cumplir sus sueños Debora Klinger se fue de Macabi Noar de Córdoba para instalarse en la Capital Federal. Sobre sus ganas de venir aquí Debby explicó: “ “La verdad es que toda mi vida, desde muy chiquita, soñaba con venirme a Buenos Aires. No me preguntes porqué, pero me gustaba mucho, desde lo que respecta al campo laboral, a las diferentes opciones que te ofrece y por otro lado, la licenciatura que me gustaba estaba acá. Asi que apenas me recibí decidí venirme”, manifestó Klinger. Vale destacar que hizo el profesorado de educación física.

Sobre el hecho de irse Córdoba señaló: “Fue bastante raro. Imaginate dejar toda mi vida, el día a día con mi familia, mis amigas, la gente del trabajo y sobre todo el club, Macabi Noar Córdoba. Son cosas que cuestan, pero por suerte estuve rodeada y de hecho lo sigo estando de todos esos afectos que me vieron crecer y anhelar este sueño. Hace poco me fui de visita para allá y fue raro volver a mi club y estar rodeada de mis amigos de toda la vida. Sin embargo, las ganas y la convicción con las que me vine hicieron que eso no sea una gran peso, sino que una pequeña barrera, que hay que intentar superarlo a medida que me vaya adaptando”.

El club de Hebraica es su nueva casa en Buenos Aires y al respecto dijo: “Me recibieron excelente, me abrieron las puertas de una forma increíble. Y es muy valorable, porque hoy en día cuesta bastante entrar a trabajar en donde querés y de lo que querés, y Hebraica, me dio esa enorme posibilidad. Fue muy lindo saber que, un club gran club como Hebraica, estaban interesados en mí para que comience a trabajar ahí mismo.

Debora es entrenadora de las infantiles de hockey de SHA y contó como viene el proceso: “Por suerte muy bien, la verdad me costó bastante al principio ya que es un grupo numeroso y revoltoso. Pero ahí está el desafío, de poder ir entrando y adaptándose a ellas, conociendo sus intereses, nivel deportivo y sobre todo escuchándolas para encontrar el bienestar tanto mío como el de ellas. La verdad, que hoy estoy muy contenta, ya que se logró generar una buena relación y compromiso en equipo. Lógicamente hay que seguir trabajando y creciendo para potenciar esto al máximo”. Y continuó: “Me gustaría agradecer a la comisión de hockey de Hebraica, al coordinador Sebastián, y al equipo de profes que me recibió de la mejor manera”.

La Cordobesa contó cuáles son sus próximos objetivos y anhelos en su estadía en Buenos Aires: “Principalmente a seguir creciendo en lo profesional, trabajando y aprendiendo para poder llegar a cumplir uno de mis máximos objetivos que es el tema de la preparación física y principalmente en el fútbol, deporte que me encanta y apasiona”.

Por Jonathan Steingard.